Lima, entre neblinas tempranas y vivencias recurrentes. Ciudad pañuelo, según las abuelas. Capital de un país tercermundista, atrasado, tradicionalista y sin oportunidades. Aquel es el mundo que le toca vivir a Sebastián Rodríguez Jiménez, joven de una clase media inexistente. Acostumbrado a la ausencia de sueños, recorre sonámbulo por calles grises, esos barrios poblados por otros parias como él, en un constante desencuentro consigo mismo. (...)